IMPLICACIONES
DE LOS FENÓMENOS DE FRAGILIDAD, COMORBILIDAD Y DEPENDENCIA DEL ADULTO MAYOR
-La Fragilidad,
por sé es un estado
transicional en el cual el deterioro no se hace manifiesto en el individuo y éste
conserva una relativa integridad, puede ser medida tanto en el ambiente clínico
como el comunitaria, tiene factores predisponentes, precipitantes , favorecedores
y reforzadores, constituye un estado de
vulnerabilidad para desenlaces desfavorables, tales como caídas y deterioro
funcional que finalmente desencadenarán una cascada de eventos, llevando a
desenlaces desfavorables, tales como DISCAPACIDAD,
DEPENDENCIA, INSTITUCIONALIZACIÓN Y MUERTE PREMATURA.
El balance entre las capacidades y déficit de un
individuo determina las consecuencias de la fragilidad para cada individuo en
particular y la capacidad individual para adaptarse, la naturaleza del entorno
físico y los recursos sociales son determinantes en su impacto.
Por lo anterior es muy importante tomar en cuenta
el envejecimiento diferencial, que no es más que el envejecimiento diferente en
cada persona.
- La Comorbilidad, implica una serie de enfermedades en el AM,
principalmente de tipo crónico no trasmisible ( ECNT), lo que constituye una
carga muy grande para el sistema de salud y además lleva implícita la polifarmacia, con el riesgo de uso de
medicamentos inapropiados y la falta de control en la interacción medicamentosa,
la falta de coordinación con los diferentes especialistas que atienden al
anciano, la falta de establecimientos, la falta de preparación de los médicos
de AP en el cuidado de este grupo de personas y por último, la gran carencia de
especialistas en la atención del AM. - La Dependencia, es un estado en el cual los individuos tienen condiciones ligadas a la pérdida de la autonomía física, psicológica, social y económica y tienen necesidad de apoyo por parte de los servicios de salud, social y/o comunitarios. Para realizar sus actividades de la vida diaria.
Implicaciones
de la fragilidad, comorbilidad y dependencia en los sistemas de salud:
1.- Tomar todas las medidas necesarias, para que el
nivel de ATENCIÓN PRIMARIA funcione
correctamente y se tomen estrategias adecuadas, tales como la vacunación,
evitar el tabaquismo, hacer ejercicio y sobre todo las dietas sanas, para evitar
la cascada de eventos que se nos vienen con los pacientes frágiles y por otro
lado hacer una campaña sistemática, para que se comprenda el proceso de
envejecimiento, desde el enfoque del ciclo de vida, lo que haría que se
comprendiera mejor que es envejecer y sus implicaciones.
2.- En el NIVEL
DE ATENCIÓN SECUNDARIO debemos de tomar medidas, para que se planeen los
sistemas de salud más allá de los hospitales de agudos, a los niveles
transicionales, como reeducación funcional y retorno al domicilio de los AM, en
condiciones más favorables, garantizándoles la atención a largo plazo, con
equipos multidisciplinarios. Sin olvidar
al CUIDADOR, quién en la mayoría de
los casos, en nuestros países, en una mujer, que termina siendo polifuncional.
3.- Probablemente el problema más serio lo tenemos
en el NIVEL TERCIARIO de atención,
ya que no tenemos programas adecuadamente diseñados, para la atención de los
adultos mayores con comorbilidad, especialmente en lo que se refiere a las
ECNT, enfermedades de alta prevalencia en este grupo, por lo que creo que
tenemos que afrontar el problema con diseño de programas para satisfacer esta
demanda.
4.- A NIVEL
DE PREVENCIÓN CUATERNARIA, creo que los más importante es la capacitación
de los equipos multidisciplinarios, especialmente del equipo médico, evitando
la polifarmacia y las interacciones medicamentosas, siguiendo el principio de
“primun non nocere” ( ante todo no hacer daño ).